14 · O CÁDAVO – SAN ROMÁN DA RETORTA
Etapa aparentemente cómoda en cuanto al perfil se refiere pero que se complica con la ola de calor reinante.
Bonitos senderos nos esperan entre pequeñas poblaciones y aldeas que nos sorprenden con sus tesoros arquitectónicos escondidos.
Lugo es parada obligada para disfrutar de sus murallas, de su catedral y de su pulpo!
O Cádavo
Comenzamos la etapa con la intención de alcanzar al hermano de Sandra, el cual había comenzado el Camino Primitivo a pie varios días atrás. Su buena planificación horaria y excelente ritmo impidieron al final dar con él.
Los primeros metros a la salida de O Cádavo es una pista de asfalto con perfil suave que se va endureciendo conforme nos acercamos a la aldea de Pradeda.
Alto de la Baqueriza
A la salida de esta población, cambiamos el asfalto por la tierra para seguir hasta el Alto de Baqueriza. Desde aquí nos restan 132 kilómetros hasta Santiago.
Superada la subida entramos en el concejo de Castroverde donde disfrutamos de un liviano descenso entre pistas forestales de pinares donde a veces se abren claros en los que, en días muy despejados, puede llegar a verse la ciudad de Lugo en la lejanía.
Durante unos 4 kilómetros descendemos por los montes de Cornedo, Fonteseca y Vilabade. El último de ellos da nombre a la siguiente población.
Capilla del Carmen
Pero antes, sale a nuestro paso la Capilla del Carmen, lugar donde hacemos una parada.
Esta capilla fue construida en el año 1607 sobre un antiguo Hospital de Peregrinos del que se tienen referencias del año 1487. En el dintel de la puerta, una figura con la letra M, inicial de la familia que mandó a construir el santuario. Este lugar celebra su romería el primer domingo de agosto en honor a la Virgen del Carmen.
Vilabade
Iglesia de Santa María
El asfalto nos conduce a Vilabade, donde se encuentra su Iglesia de Santa María, declarada Monumento de Interés Nacional y también conocida como la Catedral de Castroverde. El templo fue construido en el siglo XV y tiene influencias gótico-románicas, como puede apreciarse en su portada.
En su interior, un retablo barroco del siglo XVII preside el altar mayor. En él apreciamos la figura de Santiago en su lucha contra los musulmanes o una imagen de Santa María, virgen a la que se dedica este santuario, y a la que se hacía girar por medio de estas dos manivelas.
Pinturas murales y otros retablos barrocos conforman el resto de elementos artísticos del templo, cuyo principal enemigo está siendo la gran humedad de la zona.
El pórtico arqueado de la iglesia nos despide de Vilabade para continuar nuestro periplo que realiza ahora un cómodo descenso hasta las inmediaciones de Castroverde.
Castroverde
Iglesia de Santiago
En esta población, damos con su Iglesia de Santiago, construida en el siglo XX sobre los restos de un santuario anterior.
Fuente de los Niños
Frente a ella hay una singular escultura llamada “Fuente de los Niños”, donde un grupo de chiquillos forman un corro para cobijarse en un paragüas.
El itinerario alterna ahora diversas pistas de asfalto y tierra que flanquean la aldea de San Miguel del Camiño entre fincas y pequeñas villas residenciales. Poco después, un bonito sendero protegido por hilera de árboles nos conduce hasta Souto de Torres.
El perfil llano del terreno nos permite realizar este tramo con comodidad.
A este agradable paseo hay que añadir la alegría que siempre nos da coincidir con compañeros peregrinos.
Por su parte, el cercano río Chamoso se bifurca en riachuelos que en ocasiones atraviesan los caminos. En estaciones secas, estos riachuelos no presentan el mayor inconveniente.
Iglesia de Santo Tomé y Crucero (Souto de Torres)
La Iglesia de Santo Tomé, se encuentra en la antesala a Souto de Torres. Tiene orígenes románicos y frente a ella hay un crucero de granito en el que apreciamos una imagen del Apóstol Santiago peregrino.
Por la variante de Vilar de Cas
Dejamos atrás Souto de Torres y tras un corto sendero de tierra volvemos al asfalto. A estas alturas de la mañana, la actividad peregrina todavía era frecuente. En el trayecto, atravesamos pequeña poblaciones como Nadela o Vilar de Cas.
En efecto, a la salida de Vilar de Cas, decidimos ir a visitar la Iglesia de San Salvador de Soutomerille, lo que supone 800 metros extras, pero el trayecto es un precioso sendero emboscado donde hay una caserón del siglo XVI y un castaño de casi 350 años de edad muy protegido por los vecinos de Soutomerille.
Iglesia de San Salvador de Soutomerille
No tardamos mucho en encontrar el objetivo. Esta iglesia es de origen prerrománico aunque se reconstruyó en el siglo XVII. Del prerrománico se conserva esta ventana dividida en barrotes de piedra alargados que forman que terminan en arcos de herradura, un estilo que absorbió de Asturias. Su fachada, en cambio, es barroca y en su frontón aparece la cifra 1619, año en el que se reconstruyó la iglesia
Nos asomamos a su interior y nos apena su imagen desangelada y el lamentable estado de conservación. Un rico patrimonio que quedará en el olvido si no hay esfuerzos por mantenerlo.
Realizamos ahora un trecho por la carretera local LU-P-2917. El sol empieza a hacer mella y teniendo el alquitrán como compañero de viaje la sensación de calor todavía es mayor.
El escollo de la Cuesta Francesa
Tendremos que rebasar la población de Gondar para empezar a subir lo que se conoce como Cuesta Francesa, un corto pero apretado escollo que superamos con mediano esfuerzo.
Iglesia de Santa María (Bascuas)
Enlazamos después con una vía agropecuaria que nos introduce en Bascuas. Aquí se ubica la Iglesia de Santa María, construida entre los siglos XVIII y XIX donde llama la atención el tamaño de su espadaña en proporción a su nave.
Las fincas y el paisaje rural se suceden y pronto tendremos que tomar la carretera LU-530 para salir en un cruce dirección a Manzoi. Las señales del camino conectan rápidamente con un senda flanqueada por árboles que va sorteando en ocasiones algunos prados de cultivo.
Seguimos recorriendo la campiña lucense hasta la aldea de Castelo, que será la última que transitaremos antes de llegar a la periferia de Lugo. Un gran viaducto ferroviario nos recibe a la entrada de la ciudad.
Lugo
Murallas de la ciudad
Llegamos al casco histórico de Lugo delimitado por sus murallas. Éstas superan los dos kilómetros de perímetro, y se construyeron entre los siglos III y IV después de Cristo. Su altura oscila entre los 10 y 15 metros, con un grosor de más de 6 metros y posee unas 85 torres. Todo ello en un buen estado de conservación.
Arco del Triunfo
Entramos por la Puerta de San Pedro y nos dirigimos a su Plaza Mayor, donde se encuentra el Ayuntamiento y el Arco del Triunf0, donde el emperador Octavio Augusto entrega los planos de la ciudad al magistrado Paulo Fabio Máximo para que éste la funde.
Catedral de Santa María
Muy cerca de allí, se encuentra la Catedral, pero antes de visitarla hay que dar gasolina al cuerpo.
Volvemos a la Catedral, de advocación a Santa María. Lo primero que observamos es la fachada modernista, construida entre los siglos XVIII y XIX, pero hay que resaltar que el bloque principal del edificio se construyó entre los años 1129 y 1273, algo más de un siglo, lo que hace que en este período se mezclen estilos como el románico y el gótico, que resaltan en el interior con arcos apuntados y de medio punto.
Impresionantes son sus pinturas barrocas que cubren la bóveda del altar mayor. Una verdadera capilla sixtina. Destaca también la capilla de la Virgen de los Ojos Grandes, barroca, del siglo XVIII, que posee una imagen de la Virgen patrona de Lugo, del siglo XV. Su coro, de 16 asientos es el siglo XVII e impresiona también por el labrado de sus detalles.
Bellos retablos del siglo XVI, hermosos ventanales con trabajadas vidrieras o distintas imágenes como el Ecce Homo, el paso de la Última Cena o el Cristo atado a una columna completan nuestra visita.
Solo nos resta ir al exterior para contemplar la Puerta Norte, románica del siglo XII y XIII, de gran valor, con dintel bilobulado y con un Pantocrátor en el centro, en el interior de una forma almendrada o mandorla. Debajo, una especie de capitel suspendido que representa la última cena.
Puerta de Santiago
Abandonamos el casco antiguo por la Puerta de Santiago, cuya escultura es del año 1795.
Puente Romano
Poco después refrescamos algunas prendas en el río Miño para combatir el asfixiante calor del día. Finalmente, abandonamos Lugo cruzando el Puente Romano del siglo I, aunque ha sufrido varias remodelaciones a lo largo de su historia.
Intentamos darnos un baño en un club fluvial próximo, pero al no ser socios no pudimos aliviar nuestras penas de calor. Así que seguimos adelante combatiendo el sol como podemos.
Últimos 100 kilómetros a Santiago
La carretera LU-P-2901 va a tener gran protagonismo en el resto de la etapa. La poca sombra que se proyecta la encontramos en el carril o senda que hay a la derecha, pero sinceramente, no nos sirve de mucho. Por aquí también advertimos el punto kilométrico 100 hasta Santiago, quizá uno de los pocos elementos «refrescantes» de este tramo.
Iglesia de San Vicente do Burgo
En San Vicente do Burgo se ubica la Iglesia del mismo nombre. Una construcción barroca del siglo XVIII, que tiene en su fachada una imagen del patrón que da nombre a la localidad.
Continuamos el ardiente asfalto que entra ahora en la Parroquia de Poutomillos y poco después una bonita senda emboscada, un pequeño oasis que disfrutamos rumbo a Bacurín.
Iglesia de San Miguel (Bacurín)
A las afueras de la población se encuentra la Iglesia de San Miguel, edificio románico del siglo XII, en el que destaca en un primer momento su ábside semicircular con sus característicos canecillos que adornan los salientes que soportan la cornisa.
Su portada sur presenta un dintel bilobulado, como la que vimos en la puerta norte de la Catedral de Lugo. En su portada principal, los característicos arcos de medio punto románicos sostenidos por columnas.
El camino nos permite deleitarnos un poco más de estos densos bosques del Valle del Río Mera, afluente del Miño.
San Román de Retorta
Pero no tardamos mucho en volver al asfalto para pasar por San Pedro de Abaixo y poco después Taboeiro. Estás serán las últimas poblaciones antes de llegar a San Romao da Retorta, nuestro destino de hoy, donde hay una réplica miliario.
Todavía tendremos que rodar un poco más para llegar a los albergues, los cuales estaban abarrotados, así que el hospitalero tuvo que improvisar y mandarnos a un hostal de gasolinera al cual nos llevaron en coche. Al día siguiente volverían a traernos hasta este albergue para iniciar nuestra penúltima etapa.