Cordel TRIANA – VILLAMANRIQUE
Recorremos la comarca del Aljarafe de Sevilla por cordeles tradicionales empleados por numerosas hermandades rocieras en el camino de peregrinación hacia la localidad de El Rocío. Haciendas centenarias y vestigios de antiguas civilizaciones nos sorprenderán por estos viejos caminos de trashumancia.
Nuestro destino será Aznalcázar, donde podremos finalizar la ruta en el Centro de Visitantes del Río Guadiamar.
Para llegar allí planteamos dos variantes, una por el Camino de los Playeros y otra por el Camino de Marlo.
Pero si os veis con fuerza una vez llegados a Aznalcázar, podéis continuar disfrutando de un cómodo y agradable paseo por el Corredor Verde del Río Guadiamar.
En el siguiente enlace os dejamos nuestro recorrido de este entorno natural del Guadiamar:
👉 SENDERO del GUADIAMAR
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Mairena del Aljarafe
Hola amig@s!
Nos encontramos en Mairena del Aljarafe, localidad ubicada en la provincia de Sevilla. Partimos desde su urbanización Las Tres Barras para iniciar una sencilla ruta por la Comarca del Aljarafe de Sevilla.
Comenzar desde aquí nos permite incorporarnos rápidamente a un carril de tierra, que al mismo tiempo cambia, en un visto y no visto, el asfalto y el ladrillo por el mundo rural.
A nuestra derecha, unas parcelas de olivos y a nuestra izquierda, un extenso prado de cereal que pocos meses atrás teñía de verde la tierra, aunque con menor altura. Remontamos esta suave loma que nos presenta, una vez que la coronamos, parte del paisaje que nos aguarda.
Descendemos hacia el oeste para rodar un pequeño tramo entre los cercados de unas fincas para luego ir en busca de la depresión en la que navega el Arroyo Río Pudio.
Arroyo Río Pudio
Una galería de olivos nos baja hasta el arroyo que, como pronto podremos observar, permanece oculto entre la abundancia de cañaverales a nuestra izquierda.
El Río Pudio recorre de norte a sur un total de 22 kilómetros desde las cercanías de la localidad de Olivares hasta Coria del Río, donde termina desembocando en el Río Guadalquivir.
En primavera, este corredor verde protegido se puebla de bonita variedad de flores que jalonan la pista con bonitas tonalidades.
Azud del Molino
Además, en su caudal encajonado por cañaverales y zarzas se esconde un tesoro medieval a modo de Azud conocido como La Zúa o Azud del Molino.
Este pertenecía a un Molino Hidráulico, el único del que quedan restos de los 10 que llegó a tener el Río Pudio.
Puente Romano
Y avanzando un poco más, conectando con el Cordel de Triana-Villamanrique damos con otro hito de relevancia, el Puente Romano, que tendremos que atravesar.
Se le conoce con este nombre debido a que sus orígenes se dieron en esta civilización, cuando se tuvieron que construir puentes para que comerciantes y ganaderos pudieran salvar las crecidas del Pudio.
Debido a su deterioro, el puente sufrió una profunda restauración en el año 2002.
Por el Cordel Triana-Villamanrique
Cruzamos el puente y dejamos atrás el Corredor Verde del Pudio y un camino tradicional paralelo a él, empleado para la trashumancia a lo largo de la historia y que se le conoce con el nombre Cañada Real de las Islas.
Nuestro recorrido vuelve a dirigirse al oeste, en suave ascenso por pista de tierra, dejando a la izquierda la urbanización de fincas residenciales Entrecaminos y a la derecha la campiña con plantaciones de girasoles y cereal.
Después los olivos también reclamarán su espacio, justo cuando se aproxima un paso a nivel superior que nos permitirá salvar la Autovía SE-40 o circunvalación del área metropolitana de Sevilla. Esta pequeña subida puede que nos haga resoplar si nos coge por sorpresa.
Hacienda Torrequemada
Justo después, el descenso, se nos presenta la Hacienda Torrequemada, un edificio barroco levantado en el año 1708 cuya arquitectura tradicional andaluza apenas ha sufrido cambios.
Hoy día la mayor parte de sus instalaciones se usan para la celebración de eventos.
La Hacienda gestiona además, casi 170 hectáreas del cultivo del olivar, que corresponden ahora mismo a los terrenos que estamos atravesando.
Tras la hacienda llaneamos algo más de kilómetro y medio hasta llegar a un cruce peligroso con la carretera A-8052 que une la localidad de Bollullos de la Mitación con la de Almensilla.
Cruzad con mucha precaución y continuad por la pista de tierra que hay justo enfrente.
La Bodeguilla
Por aquí flanqueamos los olivos de la Hacienda La Bodeguilla, otra finca cargada de historia cuyas propiedades estuvieron originariamente comandadas por frailes del Monasterio de San Jerónimo de Buenavista de Sevilla, allá por el siglo XVI.
Hoy día la finca es una propiedad privada que ya lleva regentada por la misma familia desde hace cuatro generaciones.
Y progresando algo más se suceden los dominios de otras haciendas como las de Santa Clara del Higueral y de La Marquesa.
Entre olivos, cereales y girasoles
Aquí el perfil es ligeramente descendente, lo que permite disfrutar cómodamente el tránsito por el terreno parcheado de olivares, cereales y girasoles.
Nos gusta pensar que estos últimos parecen mirarnos, atentos a nuestras pedaladas, aunque lo que realmente hacen es estar orientados a la posición del sol. Pero bueno, ya que nos muestra su mejor cara, se hace irresistible sacar alguna toma a unos estupendos ejemplares.
Continuamos el camino por el Cordel de Triana-Villamanrique que como apreciáis está muy frecuentado por ciclistas y algún que otro viandante.
Hacienda Monasterejo
Ahora pasaremos junto a otra hacienda, la de Monasterejo, de procedencia desconocida, aunque pudo ser originariamente una alquería musulmana debido a los restos encontrados en la zona.
Seguimos descendiendo hasta dar con el cauce seco del Arroyo Majalberraque, al cobijo de la arboleda, y que atravesamos sin apenas darnos cuenta.
Acto seguido entramos en una amplia extensión de cultivo de cereal que nos jalona por ambos flancos.
Aeródromo de Bollullos de la Mitación-La Juliana
Por aquí, advertiremos la presencia de las instalaciones del Aeródromo de Bollullos de la Mitación-La Juliana, ideal para la práctica de deportes aéreos y que dispone también de escuela para pilotos.
Son muchos los que aquí vienen a realizar su primer salto en paracaídas.
Descansadero de la Cruz del Ponce
A continuación mostraros un detalle que nos llamó la atención en el Descansadero de la Cruz del Ponce. Se trata de una Cruz de la Orden de Santiago, puesta aquí para recordarnos el traslado de la Virgen de Cuatrovitas desde su Ermita hasta la localidad de Bollullos de la Mitación.
Este traslado se hace el 25 de julio, el mismo día de la festividad de Santiago Apóstol.
A poca distancia se encuentra la Ermita, que visitaremos sin falta.
Mientras nos alejamos de este lugar ya podéis observar por un lado, a los paracaidistas descendiendo a tierra, y por otro lado, al avión regresando al aeródromo para cargar otra remesa de nuevos valientes.
Ermita de Cuatrovitas
Pasamos junto al antiguo caserío de La Juliana y pocos metros después encontramos un desvío que nos llevará a la Ermita de Cuatrovitas.
Este edificio tiene su origen en una joya arquitectónica almohade, datada entre los siglo XII y XIII.
De su edificio original, que debió ser una mezquita, se conserva el alminar, aunque tenía un cuerpo superior que fue destruido. Esta estructura fue levantada a base de ladrillos y decorada con arcos de herradura y polilobulados.
El resto del edificio se adaptó para transformarlo en un templo Cristiano. El interior da cobijo a la Virgen de Cuatrovitas, cuya primera imagen apareció en el siglo XVI, aunque posteriormente se sustituyó por otra en el siglo XIX.
La talla es muy venerada por los vecinos de estas tierras, cuya romería tiene lugar el último fin de semana de octubre.
Por caminos tradicionales de peregrinación
Regresamos a Cordel de Triana-Villamanrique donde el patrón del terreno vuelve a estar dominado por los olivos, aunque de cuando en cuando aparecen áreas de pinares que nos resguardan del sol.
Tenemos que decir que este cordel es el que usan tradicionalmente muchas hermandades rocieras en el peregrinaje hacia el Santuario del Rocío, y continuarán poco después por el Cordel del Camino de los Playeros.
Camino de los Playeros
Esta bifurcación la encontraremos aquí, a la altura de este pino conocido con el nombre Pino de Rafael. No sabemos exactamente a qué se debe el nombre, aunque clavado en su tronco hay una sencilla placa en recuerdo a una persona fallecida.
En la otra orilla del camino se ubica la placa que da inicio al Camino de los Playeros, nosotros no tomaremos este ramal, aunque os mostramos algunas imágenes del recorrido que se adentra en los Pinares de Aznalcázar.
Un área dominada por el Pino Piñonero aunque también tienen cabida los pies de encina, el acebuche y el sotobosque de jara, romero y monte blanco.
Cuidado con los arenales que podréis encontrar en la pista central. Podréis sortearlos por una estrecha vereda que navega a la derecha.
Una vez en el Área Recreativa de los Pinares de Aznalcázar daremos con la carretera SE- 667, que siguiéndola dirección norte por un corredor verde paralelo también nos lleva a Aznalcázar.
Aunque antes, si tenéis tiempo, podéis reponer energías en las instalaciones del Bar Dehesa Nueva.
Esta es la opción por el Camino de los Playeros, pero si no la seguimos y continuamos recto una vez pasemos el Pino de Rafael, tomaremos la Vereda del Camino de Marlo .
Camino de Marlo
Por aquí también encontraremos un firme con algunos arenales que pondrán a prueba nuestro equilibrio.
El paisaje por aquí nos aporta grandes cambios, los olivos y pinares colman el paisaje aunque conforme nos vamos aproximando a Aznalcázar se van agregando algunas fincas con pastos y otras variedades de cultivos.
Después los cercados se van sucediendo, uno de ellos flanquea el Campo de Golf las Minas. Tras este tramo de parcelas nos incorporamos al Camino de Coria, el cual nos llevará directamente a la entrada de la localidad de Aznalcázar.
Este camino se interrumpirá momentáneamente por el peligroso cruce de la carretera A-474. Lo atravesaremos con precaución para continuar todo recto y comenzar a circular entre las viviendas de la urbe.
Centro de Visitantes Guadiamar
Avanzamos después por la Calle Nueva para luego tomar la denominada Bejarano Altamirano y descender hasta nuestro objetivo final, el Centro de Visitantes Guadiamar.
Aquí también podréis reponer fuerzas con su carta de desayunos y comidas.
Y si os sentís con fuerza, no dudéis en realizar algunos kilómetros del Corredor Verde del Río Guadiamar, un bonito y cómodo paseo paralelos al río que atesora una gran riqueza natural.
Hasta la próxima!