Isla de Arousa
CAMINO PORTUGUÉS CENTRAL - PADRE SARMIENTO,  VARIANTE ESPIRITUAL

6 · ARDIA – ISLA de AROSA

 
La bella Isla de Arosa nos aguarda en esta etapa.

Iniciamos la jornada afrontando el tramo más duro del día: la subida al Monte de Siradella. Algo más de 2 Km de ascenso en el que hay que acumular unos 150 metros de ganancia de altura.

En ciertos aspectos nos trae a la memoria la mítica subida a Labruja, pero es algo más liviana y las vistas que se contemplan desde su Mirador al Istmo de La Lanzada son espectaculares.

Descendemos para salir de la península de O Grove y perfilar el Complejo Intermareal Umia – O Grove – La Lanzada – Punta Carreirón y Lagoa Bodeiro entre lagunas costeras, dunas, estuarios, humedales y marismas.

Un terreno arcilloso que fue aprovechado en el siglo XIX para implantar numerosas fábricas de tejas y de ladrillos.

Nuestro paso coincidirá con la marea baja, donde seremos testigos de la actividad del Marisqueo.

Tras cruzar el Umia llegaremos a Cambados, donde nos detendremos para visitar algunos de sus hitos patrimoniales.

Después cruzaremos un puente de unos 2 kilómetros para alcanzar la Isla de Arosa, donde comenzamos a recorrer la primera parte de sus 36 km de costa pegados al litoral, divisando numerosas playas en parajes naturales que hacen las delicias de miles de turistas.

Finalizaremos el día en el Mirador Con do Forno, el punto más alto de la isla, donde podremos obtener fantásticas panorámicas del entorno.


👉DESCARGA EL TRACK DE LA RUTA

Ardia

Hola amig@s!

Nos encontramos en Ardia, en el concello de O Grove, iniciando la 6ª Etapa en otro bonito día para darle a los pedales.

El sol, que se alza desde las ondulaciones de la provincia de Pontevedra, ya empieza a reflejarse en la masa de agua del Complejo Intermareal Umia – O Grove.

Vistas del amanecer en Ardia

Vistas del amanecer en ArdiaNosotros aprovechamos sus primeros rayos para ver con más claridad el camino que nos introduce unos metros por el Monte Vello alejándonos por tanto de la carretera PO-316.

No obstante, después nos incorporamos a una pista asfaltada que regresará a esta carretera, aunque circulando paralelo a ella, lo que nos evitará en intenso tráfico.

Ascenso al Monte Siradella

Después tomaremos una pista de tierra para iniciar el plato fuerte de esta jornada, el ascenso al Monte da Siradella, algo más de 2 km en el que acumularemos unos 150 metros de ganancia de altura.

Las primeras rampas engorrosas no se hacen esperar en los compases de inicio.

Después nos internamos en una zona emboscada, mayoritariamente de pinares, circulando por una pista de tierra que en ciertos tramos se vuelve movedizo por la arena. También encontraremos otros elementos que entrañan dificultad, como la presencia de piedras y ramas.

En cierto modo nos trae a la memoria la subida a la Sierra de La Bruja, aunque bien es cierto que Siradella es menos abrupta. Cuando el terreno nos deja avanzamos con las dos ruedas y cuando no, hay que echar pie a tierra.

De todas formas, también merecen la pena unas paradas para contemplar las peñas erosionadas que empiezan a rodearnos. Las curiosas formaciones nos empujan a subirnos en algunas para revisarlas mejor.

Y después, a continuar, no sin esfuerzo.

Subiremos a otras peñas rocosas que parecen ofrecer en la cima buenas panorámicas, pero la abundancia de pinares dificultan las vistas.

Mirador da Siradella

Así que para disfrutar de unas estupendas estampas tendremos que realizar un último esfuerzo y alcanzar el Mirador da Siradella.

Desde aquí podremos contemplar el Atlántico y la Isla de Ons, el Itsmo y Playa de La Lanzada, el territorio del Concello de Sanxenxo y el Complejo Intermareal Umia – O Grove.

Vistas al Istmo y Playa de La Lanzada y al Complejo Intermareal
Vistas al Istmo y Playa de La Lanzada y al Complejo Intermareal

A escasos metros de nosotros se encuentra la Piedra Caballera, otra curiosa formación granítica provocada por el desgaste. Subir aquí también conlleva su desgaste, aunque lo celebramos como se merece.


Descenso complicado

Toca bajar. Aunque iniciamos por asfalto por la carretera EP-9102, a los pocos metros nos incorporaremos a una senda con una pendiente bastante pronunciada que no nos da mucha confianza. Con el firme deslizante, estrecho y salpicado de concavidades lo mejor es recorrerlo a pie.

A Revolta

El trazado mejora los últimos 600 metros del descenso lo que nos permite llegar con rapidez a la carretera PO-317. Esta carretera conectará con la PO-316 que perfilará el Istmo de La Lanzada por su flanco oriental hasta llegar al lugar de A Revolta, de nuevo en el Concello de Sanxenxo.

Aquí encontraremos algunas manifestaciones Xacobeas, como estas señalización o este crucero de granito.

Continuamos por A Revolta hasta salir por una cómoda pista de tierra que empieza a dirigirnos entre pinares al litoral del Complejo Intermareal Umia – O Grove.

Complejo Intermareal Umia – O Grove

Pronto comenzaremos a encontrarnos con las primeras lagunas costeras, propias de este entorno cargado de humedales. Este lugar es una extensa llanura compuesta mayoritariamente de fango y arena y debido a su característico hábitat, flora y fauna está incluido dentro del Listado de Humedales de Importancia Internacional y considerado Zona de Especial Protección para las Aves.

Laguna costera
Laguna costera

A nuestra izquierda, iremos dejando siempre la Isla de la Toja y O Grove, con un Monte de Siradella que ahora nos saluda desde la lejanía.

Humedales de fango y arena
Humedales de fango y arena

Aunque el tránsito es en general cómodo, el desbroce reciente en ciertos tramos carga el firme de desechos que nos hacen circular con pesadez. Afortunadamente son pocos metros y pronto encontraremos la pista limpia.

Lagunas de Rouxique

Nuevas lagunas salen a nuestro paso, son las llamadas Lagunas de Rouxique, que en su momento fueron creadas por el hombre para aprovechar el material arcilloso del suelo para la industria de la cerámica.

Hoy son auténticos espacios regenerados por la propia naturaleza en los que hacen vida distintas especies de aves.

Arnosa

A continuación, progresamos paralelos a la Ensenada de Arnosa para después introducirnos por las arterias de su localidad homónima.

Por la Ensenada de Arnosa
Por la Ensenada de Arnosa

De Arnosa pasamos a A Salguiera, y de esta última hasta A Fianteira, de vuelta a un paseo litoral que ahora nos recibe alegre con el júbilo de un excursión de jovencit@s.

Mueso As Telleiras

No tardaremos mucho en dar con una muestra representativa de la industria de la cerámica que se implantó aquí a mediados del siglo XIX para aprovechar las propiedades del suelo arcilloso.

Y lo hacemos topándonos con esta enorme Telleira u horno con el que se cocía la arcilla para producir tejas o ladrillos. La cocción duraba unos 7 días en los que había que estar vigilantes del fuego para mantener la temperatura correcta.

La historia de esta industria puede conocerse mejor en el museo contiguo a la chimenea, creado a partir de las instalaciones de unas de las 28 fábricas de cerámica que llegaron a existir en la zona.

Río da Chanca

El viaje continúa acercándonos ahora a la desembocadura del Río Da Chanca, uno de los grandes afluentes, junto al Umia, que realizan su aporte de agua a estos humedales.

Concretamente, en sus proximidades se ha creado un rico complejo de marismas en la que podemos disfrutar de la combinación de un valioso patrimonio natural, etnográfico y paisajístico.

Estuario del Río da Chanca
Estuario del Río da Chanca

Cruzamos el Río Da Chanca por un puente para continuar por el lugar de Os Seixiños.

Os Seixiños

Por aquí iremos flanqueando el humedal de la Ensenada da Chanca a nuestra izquierda, y a nuestra derecha, cuantiosas plantaciones de viñedos, un cultivo que también sabe aprovechar los beneficios de las propiedades de este suelo.

Telleira de Os Seixiños

Al poco, llegamos a la Telleira de Os Seixiños, restaurada a principios del siglo XXI como mirador pero tras determinados actos incívicos en el lugar se decidió cerrar el acceso al horno.

La señales nos introducen ahora en las aldea de Os Seixiños y O Couto de Abaixo donde el cultivo de viñedos saca músculo repartido entre numerosas parcelas.

Después regresamos unos metros a la ensenada por la desembocadura del Rego da Carballa para luego volver de nuevo a navegar entre las parras.

Ensenada da Chanca
Ensenada da Chanca

Senda Litoral Umia – O Grove

Finalmente nos incorporamos a la línea costera por el saliente Punta Bico da Ran para continuar por aquí hacia el norte por una cómoda pista de tierra.

Tras varias pasarelas de madera y la sombra de algunos pinos y eucaliptos accedemos a un par de suculentos arenales ya en el Concello de Cambados. El primero de ellos es la Praia de Fontiña, de unos 300 metros de longitud, de aguas limpias y cristalinas flanqueada por parcelas de cultivos y fincas residenciales y algunos metros de bosque.

Lo mismo ocurre con la playa que la sucede justo después, la Praia de Seiñas, aunque su perfil asemeja más al de una concha y entre su arena también encontraremos rocas.

Metros más tarde damos con las ruinas de una antigua fábrica de ladrillos cuya alta chimenea del horno bien las delatan.

El Marisqueo

Están orientadas al oeste, frente a la Isla de la Toja aunque justo en medio del Complejo Intermareal se interpone la Isla de Beiro, donde agradecemos la marea baja para ser testigos de las actividades de marisqueo, un trabajo fuertemente arraigado a las raíces gallegas.

Mariscadoras y mariscadores en la Isla de Beiro
Mariscadoras y mariscadores en la Isla de Beiro

Más al norte, la Isla de la Toja Pequeña, donde las labores de captura de moluscos y crustáceos no cesan.

Sentiremos un poco más de cerca a mariscadoras y mariscadores en la Punta das Laxes, a la que llegaremos una vez dejadas atrás las inmediaciones de la aldea de O Facho.

Pararemos en este saliente, que es también playa (Praia do Carrelo) para contemplar con fascinación este trabajo tradicional de la forma de vida de las Rías gallegas.

Mariscadoras y mariscadores en Punta das Laxes
Mariscadoras y mariscadores en Punta das Laxes e Isla de la Toja Pequeña

No solo se trata de recoger el marisco, si no también de cultivarlo y conservarlo respetando para ello el medio natural en el que se desarrollan. Para nosotros, sin duda, es otro aliciente más del atractivo turístico de este viaje.

Dado que esto es un Paraje Natural, no os extrañéis con la presencia de unas casetas verdes: son observatorios para el avistamiento de especies ornitológicas.

Ensenada do Umia

Sobre todo podremos tener más suerte para verlas por aquí, en las proximidades de la Ensenada do Umia que ahora perfilamos entre zonas emboscadas de eucaliptos que se alternan con pequeñas plantaciones de viñedos.

El Río Umia que desemboca muy cerca de aquí ha creado un fantástico estuario rico en nutrientes, el perfecto reclamo para atraer a numerosas especies de aves.

As Quintáns, Baltar y A Barca

Continuamos describiendo el dibujo de la línea costera por esta cómoda y agradable pista en la que se avanza con rapidez. Después, vamos un poco tierra adentro por asfalto para circular por las propiedades de la aldea de As Quintáns, lugar en el que el cuerpo empieza a pedir gasolina.

Intentaremos almorzar en el Bar Restaurante Tropezón, al que llegaremos tras pasar las aldeas de Baltar y A Barca. Pero no tenemos suerte, las numerosas reservas hacen que este lugar no pueda hacernos hueco.

Al menos un panel informativo que hay enfrente con la imagen del Padre Sarmiento poniéndonos buena cara hace que no nos vengamos abajo.

Panel Informativo sobre la Ruta del Padre Sarmiento
Panel Informativo sobre la Ruta del Padre Sarmiento

También, justo al lado, siguiendo la carretera PO-550 se encuentra el puente por el que tendremos que cruzar el Río Umia para continuar el viaje.

Cambados

Praia da Mouta

Vamos directos a la Praia da Mouta perteneciente ya a la localidad de Cambados, en su Barrio de Santo Tomé. De hecho es una arenal urbano de unos 300 metros de longitud, rodeado de viviendas y finalizada al oeste por un interesante hito patrimonial.

Praia da Mouta
Praia da Mouta

Pero antes de visitarlo, abrimos aún más la boca del estómago interesándonos por las capturas de estas mariscadoras. Después, nos dimos un buen festín en el Restaurante Casa Pintos, muy cerca de aquí.

Torre y Puente de San Sadurniño

Al oeste de la Praia da Mouta se alza en el Islote de A Figueira los restos de un antiguo edificio defensivo: la Torre de San Sadurniño.

Islote de A Figueira
Islote de A Figueira

Fue construida entre los siglos VIII y IX después de Cristo, seguramente sobre los restos de un conjunto más antiguo, quizá romano o fenicio, según algunos hallazgos encontrados.

Aunque con marea baja se puede llegar a este islote, se construyó un estrecho puente de piedra de unos 200 metros para llegar a él.

La Torre de San Sadurniño se levantó para defender el territorio de los ataques de bárbaros y normandos. También sirvió de linterna o faro para alertar sobre ataques inminentes mediante señales lumínicas a los territorios colindantes, entre ellos Catoira, valioso bastión para la defensa y protección de Santiago de Compostela.

Las vicisitudes históricas hicieron que la torre pasara por varios propietarios y sufriera algunas reconstrucciones tras los daños en algunas contiendas. Pero en 1755, con el terremoto de Lisboa el edificio terminó por derrumbarse, y así quedó hasta nuestros días.

Torre y Puente de San Sadurniño
Torre y Puente de San Sadurniño

A pesar de los escasos restos que se conservan, todavía se puede apreciar el tiro de una chimenea y una ventana.

Puerto de Cambados

Continuando nuestro viaje hacia el norte, damos con la Praia de Santo Tomé, un arenal urbano de unos 120 metros de longitud que se encuentra protegida al abrigo del Puerto de Cambados.

Concretamente en este puerto fondean las embarcaciones de pesca tradicional y aquellas otras para uso recreativo. Algo más retirado está el Puerto de Tragove destinado sobre todo a dar servicio a la flota pesquera de la Ría de Arosa.

Panel Informativo en el Paseo Marítimo
Panel Informativo en el Paseo Marítimo

Tras recorrer el paseo marítimo disfrutando de la Ensenada de Cambados entramos en la localidad para dirigirnos a su Casco Histórico, donde la Plaza de Fefiñans hace de centro neurálgico.

Plaza y Pazo de Fefiñáns

Aquí podemos diferenciar un conjunto patrimonial de bastante interés. Por un lado el Pazo de Fefiñáns, construido en forma de L en el siglo XVI en estilo renacentista. En su extremo más corto se levanta una torre almenada.

Plaza y Pazo de Fefiñáns
Plaza y Pazo de Fefiñáns

Su planta baja está ocupada por famosas bodegas dedicadas a la elaboración del vino Albariño. Actualmente la propiedad pertenece a los descendientes de los Marqueses de Figueroa.

En el extremo norte del conjunto hay una construcción barroca que consta de un puente con una arcada.

Iglesia de San Benito

Por otro lado, visitamos la Iglesia de San Bieito, o de San Benito en castellano. En sus orígenes fue un templo románico aunque sus muros sufrieron reconstrucciones en los siglos XV y XVII.

Exteriormente, el estilo que predomina es el neoclásico, a excepción de sus torres campanario que son de estilo barroco. En su fachada sur hay escudos y blasones nobiliarios que adornan la construcción hecha a base de sillares, y en la muralla de acceso al recinto pueden verse los Guerreros de granito de Balboa, colocados aquí como símbolo de protección del lugar.

En el interior de una sola nave se adivinan las trazas góticas en la bóveda en la que se emplearon distintos elementos para su reconstrucción. La bóveda del crucero conserva su nervadura, la cual termina en una clave a modo de escudo heráldico perteneciente al Marquesado de Figueroa.

En el Altar Mayor se exhibe un retablo barroco presidido por el patrón del templo, San Benito.

La iglesia contiene otros retablos y capillas de interés, como la que contiene la sepultura de Don Gonzalo de Valladares, promotor del templo.

Salimos de Cambados retomando el perfil costero hacia las proximidades de San Mamede de Corvillón.

Molino de Mareas de A Seca

Por aquí nos internamos en una ensenada cuyas mareas eran aprovechadas por un molino para moler el cereal. Hablamos del Molino de Mareas de A Seca, hoy convertido en museo, y se valía también de una presa de unos 50 metros con 5 compuertas para facilitar el proceso de molienda.

Fue construido en el siglo XVII por Don Gonzalo de Valladares I Vizconde de Fefiñáns. Con marea baja la parte represada se suele quedar sin agua, pero eso se le llama Estanque de A Seca.

Estanque de A Seca
Estanque de A Seca

Tragove y Viña Grande

Tras el molino, callejeamos por las arterias de Tragove para alcanzar la costa por la Praia Porqueira. Seguidamente el camino se interna en un tramo entre pinos y eucaliptos para luego hacerlo por otro un poco más engorroso debido a ciertos desbroces y piedras.

Praia Porqueira
Praia Porqueira

Ante tal panorama las señales nos devuelven al interior, a las inmediaciones de Viña Grande ya en el Concello de Vilanova de Arousa. Si tenéis interés, por aquí podéis encontrar bodegas de gran prestigio en la elaboración de vino Albariño con sello de calidad de Denominación de Origen Rías Baixas.

Praias de As Patiñas, Castelete y Cabalgada

Lástima no poder detenernos, nuestro cometido nos empuja a seguir recorriendo el litoral que ahora nos presenta unos arenales más funcionales y turísticos, como el de la Praia de As Patiñas, de unos 600 metros de larga de grano fino y dorado.

O las contiguas playas de Castelete o Cabalgada, todas ellas ideales para el baño y con vistas en primera línea a la Isla de Arosa y al impresionante puente que permite su acceso por tierra.

Praia Cabalgada y Puente de Isla de Arosa
Praia Cabalgada y Puente de Isla de Arosa

Puente de la Isla de Arosa

A esta gran obra de ingeniería inaugurada el 14 de septiembre de 1985 tendremos que subirnos para recorrer sus 2 kilómetros de longitud hechos a base de hormigón y acero.

Por aquí es fácil sentirse parte de la expresión como una raya en el agua.

Vístas a la Ría de Arosa desde el puente
Vístas a la Ría de Arosa desde el puente
Circulando por cómodo carril costero entre playas

Una vez llegados a la isla vamos a empezar a recorrerla en sentido contrario a las agujas del reloj encontrándonos primero, por tanto, con la Praia do Vao en su vertiente norte. Con 700 metros de longitud es una de las playas más largas de la Isla.

La Isla de Arosa nos sorprende con un delicioso carril de tierra que permite recorrer gran parte del dibujo de su litoral al tiempo que disfrutamos del escaparate del paraje natural de sus playas.

Carril costero
Carril costero

De la Praia de Riasón pasamos algo distanciados pero luego, en la de Aguillón, casi parece que estemos circulando por los 300 metros de su orilla. Por cierto, desde aquí hay buenas vistas a Vilanova de Arousa, localidad que visitaremos en la próxima etapa.

Tras la Punta do Aguillón damos con la Praia Muro da Vella y justo después con la de A Sapeira y Cabodeiro, ambas pertenecientes al mismo entrante en forma de ensenada pero separadas por el pequeño muelle Peirao do Cabodeiro.

Tras Cabodeiro rodeamos el saliente de Punta do Furado por un tramo emboscado para dirigirnos al oeste y toparnos con otro arenal, el de Aguiuncho que con marea alta apenas deja espacio para colocar la toalla.

Praia de Aguiuncho
Praia de Aguiuncho

Puerto de Xufre

Su extremo occidental se da de bruces con el complejo del Puerto de Xufre, el más destacado de la isla por albergar gran parte de la actividad pesquera y de su subasta, llevada a cabo en la lonja.

Arousa

Bordeamos las instalaciones portuarias por la pista de tierra hasta que las señales nos introducen en la localidad de Isla de Arosa por su paseo marítimo.

Estamos en la orilla norte de la villa y aunque nos parezca increíble, desde aquí tan solo nos separan 150 metros de la orilla sur por lo que podemos imaginarnos lo estrecha que es la lengua de tierra de esta franja en la que se distribuyen las viviendas de la urbe.

El paseo marítimo finaliza con la talla de la Virxe do Carmen sosteniendo al Niño Jesús por los brazos. El artista Alfonso Vilar talló en 1984 esta imagen de 3 metros para homenajear a la patrona de los marineros y pescadores y celebrar al mismo tiempo la remodelación de este Paseo Marítimo.

Abandonamos la localidad progresando por el carril que bordea la Ensenada Norte de San Xulián. Una pista que hace las veces de ruta senderista hacia el Faro Punta Cabalo aunque primero nos dirigirá hacia el extremo más septentrional de toda la isla, la Punta do Campelo.

Hacia Punta do Campelo
Hacia Punta do Campelo

11 Kilómetros de Playas de los 36 de litoral

Mientras llegamos o no es inevitable no parar para deleitarnos con este litoral paradisíaco envuelto por las aguas tranquilas de la Ría de Arousa. Por este flanco sin embargo apenas se adivinan arenales aunque no pierde su atractivo, y es que de los 36 kilómetros de costa de la isla unos 11 están ocupados por playas.

Ver cada vez más cerca las bateas destinadas a la cría del mejillón significa aproximarnos a la Punta do Campelo, saliente que rodearemos para virar el rumbo al suroeste y dejar el Faro Punta Cabalo al alcance de nuestra mirada.

Por esta vertiente sí asoman bellos arenales, como Praia A Cova o Praia do Naso, encajonados en la orografía escalonada y aderezados por la fractura rocosa pulida por el viento y el agua.

Faro Punta Cabalo

El paseo es todo un desfile de estampas que nos dirige a uno de los Faros más pequeños de Galicia. El edificio se inauguró en el año 1853 y fue construido un año antes por el ingeniero Celedonio de Uribe. La estructura original apenas ha sufrido reformas, pero sí su linterna que fue automatizada en el año 1924 llegando alcanzar hoy día las 10 millas náuticas.

La Punta Cabalo donde se ubica es un buen lugar para escudriñar los alrededores.

Costa salpicada de curisosas formaciones rocosas
Costa salpicada de curisosas formaciones rocosas

Una de los elementos que más llaman la atención son las rocas que se distribuyen a lo largo del litoral, algunas juegan con nuestra imaginación y otras no dejan indiferentes con posiciones imposibles, como la famosa Piedra Monopode.

Al suroeste, la Praia Area da Secada, de más de 400 metros de longitud y una de las más concurridas de esta zona.

En la orilla opuesta de la Ría, podemos ver los relieves de la Comarca de Barbanza salpicada de pueblecitos que adornan su costa.

Ascenderemos unos metros para por un lado, descubrir otro arenal más, el de Sualaxe, al cobijo del saliente de Cabalo, y por otro lado, para dominar con algo más de perspectiva este paraje y dar respuesta al porqué la isla de Arosa encuentra en el turismo otro gran motor impulsor de su economía, aparte del marisqueo y la pesca.

Praia de Sualaxe
Praia de Sualaxe

De un simple vistazo no hace falta citar las numerosas posibilidades de ocio para disfrutar de este mágico lugar. Aquí los mejillones parecen contagiarse del buen ambiente para seguir creciendo sanos y sabrosos.

Faro Punta Cabalo
Faro Punta Cabalo

Continuamos el paseo flanqueando la Praia Area da Secada y deteniéndonos en la que viene a continuación, la Praia da Pombiña, la más occidental de toda la Isla.

Praia da Pombiña

Praia da PombiñaBuen momento para despedirnos del faro y retomar el camino dirigiéndonos ahora al sureste, dejando atrás el saliente de Barbafeita y la Cala Trofeso.

Con de Forno

A continuación, volvemos a adentrarnos en las calles de Arousa para ir en busca del mirador Con do Forno. Es el punto más elevado de toda la isla, unos 63 metros de altura. Justo en este punto se colocó en 1962 esta enorme talla del Sagrado Corazón.

Y como ella abrimos los brazos para recibir con asombro las fantásticas vistas que desde aquí se obtienen de casi toda la isla y de gran parte de la Comarca de Salnés. Una maravilla.

Mirador Con de Forno
Mirador Con de Forno

Seguro que el Padre Sarmiento estuvo seducido a quedarse aquí y no continuar su viaje.

Mirador Con de Forno
Mirador Con de Forno
Mirador Con de Forno
Mirador Con de Forno

A nosotros se nos ocurre a veces. Pero bueno, todavía nos restan cosas muy interesantes por conocer y no podemos dejarnos embaucar.

Finalmente, callejeamos unos últimos metros por la urbe hasta dar con nuestro hospedaje.

Mañana terminarermos de recorrer la Isla.

Hasta la próxima!

Dejar una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *